El factoring es un contrato mediante el cual una compañía (el “cedente”) vende sus facturas o cuentas por cobrar a una entidad financiera especializada (el “factor”). A cambio, recibe de forma inmediata un porcentaje del valor nominal de esas facturas. El factor, a su vez, asume la gestión y el riesgo de cobro frente al cliente deudor, liberando a la empresa vendedora de trámites administrativos y morosidad.
En el contexto colombiano, donde los plazos de pago pueden extenderse más de 60 días, el factoring en Colombia se ha consolidado como un instrumento estratégico para mejorar el capital de trabajo y garantizar la continuidad operacional.
¿Cómo funciona el factoring en Colombia?
- Selección de facturas: La empresa elige las facturas que desea ceder al proveedor de factoring.
- Verificación: El factor realiza una evaluación del deudor y valida la calidad crediticia de las facturas.
- Desembolso inmediato: Una vez aprobadas, la empresa recibe entre el 80% y el 90% del valor de la factura en cuestión de 24 a 48 horas.
- Gestión de cobro: El factor se encarga de reclamar el pago al cliente deudor en la fecha de vencimiento.
- Liquidación final: Al recibir el pago del deudor, el factor entrega el saldo restante a la empresa, descontando la comisión pactada.

Ventajas del factoring en Colombia
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Liquidez inmediata: Convierte tus ventas a crédito en efectivo disponible para reinversión.
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Sin endeudamiento: No incrementa pasivos ni afecta tu capacidad crediticia.
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Gestión externalizada: Ahorra tiempo y recursos al delegar el cobro de facturas.
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Protección contra la morosidad: Al optar por factoring con recurso, el riesgo de impago recae sobre la empresa; con factoring sin recurso, lo asume el factor.
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Flexibilidad: Puedes ceder facturas de diferentes plazos, montos y clientes según tu necesidad de caja.